jueves, septiembre 21, 2006

Nadie es indispensable



Milagrosa Carrero

El 19 de Septiembre no es una fecha que vaya a quedar grabada en los anales de la historia, y sin embargo, ha sido un día raro, en el que después del anuncio de Ibarra sobre su decisión de no presentarse como candidato a las próximas elecciones, todos parecíamos algo nerviosos, y muchos impacientes por conocer el nombre de su sucesor.
La decisión del Presidente Juan Carlos, después de ganar, a la cabeza del PSOE, en seis ocasiones seguidas las elecciones, en cinco de ellas por mayoría absoluta, equivale a su renuncia a la Presidencia de la Junta, que nadie duda hubiera vuelto a ocupar, de haber optado por presentarse nuevamente como candidato.
Desde 1983 hasta ahora, las cosas han cambiado mucho. Pocas cosas, de las que Ibarra se ha propuesto, se le han resistido, y los extremeños, pueblo agradecido, saben valora a su Presidente, al que califican de hombre honrado, y en el que depositan sin reparos su confianza. Esta fama de honradez, casi tozuda, le ha llevado a granjearse a veces, la simpatías de la propia oposición, que ahora lo despide con sus mejores deseos.
Fuera de Extremadura tampoco han pasado desapercibidas sus cualidades, y es famoso por sus personalísimas posiciones políticas en muchos temas, que lo han llevado a mantener en ocasiones enfrentamientos dialécticos con otros políticos, siempre intentando mantener una postura firme y consecuente con sus propias convicciones.
A estas alturas de su carrera, nadie le niega la importante labor que ha realizado al frente del ejecutivo extremeño, uno de los Gobiernos Autonómicos más valorados, según la última encuesta del CIS, y su marcha, a nadie deja indiferente, pero aun así, la decisión tampoco genera malestar alguno, porque tanto él como el partido que lo respalda, tienen la completa tranquilidad de que el PSOE va a mantener una amplia mayoría, en las próximas elecciones autonómicas.
El proyecto de desarrollo de Extremadura está en marcha, todos entienden que va a seguir funcionando sin Ibarra; E incluso hay ciertos sectores, dentro y fuera del partido, que consideran el cambio aconsejable, como ejercicio sistemático, dentro de una democracia.
Así, no es de extrañar que dentro del lógico agradecimiento a la dedicación prestada por Juan Carlos Rodríguez Ibarra, y a pesar de la valoración positiva de su labor, parte del electorado entienda que es conveniente evitar los cargos políticos vitalicios, por principio, y considere el relevo como una forma de revitalización, que lógicamente, aporta nueva energía, evitando al mismo tiempo, ese distanciamiento de la realidad que tantas veces hemos visto en otros líderes, y que suele conducir a un endiosamiento nada aconsejable.
Aun así, recordando esos emotivos discursos de Juan Carlos, llenos de parábolas, con sus populares ejemplos, de tipo coloquial, sobre lo cotidiano, que nos han enganchado alguna vez, a todos, como a niños, resulta difícil evitar cierta nostalgia.
Pero la historia no se acaba aquí, sino que sigue. A Ibarra le queda una vida por delante, yo le deseo que feliz, para acompañar en este viaje, a la tierra y al partido a los que ha dedicada tanto esfuerzo, desde un asiento, más o menos, de atrás del autobús – de él dependerá -, desde donde podrá pararse a disfrutar de los matices del paisaje, mientras Extremadura seguirá su camino, hacia un horizonte donde se distinguen unos objetivos claramente definidos, que el futuro sucesor de Ibarra, no dudo que Fernández Vara, tendrá que andar al frente de la Junta, y a juzgar por su brillante trayectoria, su experiencia, su carisma mediático, y el amplio consenso que su candidatura ha logrado tanto entre sus compañeros de filas, como en el resto del electorado, con inmejorables perspectivas de éxito.
Así es la vida: Nadie es indispensable.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Valla por vaya en la primera línea (que es profe de secun)

Me gusta esto de ser progresista

Unknown dijo...

Pos asín to, la paya esta es asín de curta, por eso está en er pesoe, er sozialismo de puerto urraco.

Anónimo dijo...

hay que ser un tanto pretencioso y borreguil para estar nervioso por conocer el sucesor de Ibarra. ¿Qué es un rey o socialista? Porque si es lo último no tiene sucesores... Como si lo capital fuera tener líder, manso del rebaño, jerarca de la grey, jefe de la cosa vostra, mandamás, caudillo... Ay, como llevaba razón el siquiatra Enrique Hernández Duro al comprobar y escribir, con un análisis riguroso, que los políticos (y sus palmeros, jaleadores y comparsa) de aquí sólo tiene como maestro al Caudillo, con Mayúscula, que no lo quiero nombrar de propio. Ay Milagrosa, Milagrosa... ¡Qué nervios, que desazón y comezón porque el trono de la zona queda vacío, hasta que el grande Ibarra nombre sucesor...

Milagrosa Carrero Sánchez dijo...

Anonimous, tu estilo literario es tan personal que te conozco.
Bien sabes que son otros los miedos que nos han azorado, y aun así, ahora vuelve a brillar cierta esperanza...

Unknown dijo...

ahora vuelve a brillar cierta esperanza...

Rafael del Barco Carreras dijo...

Más sobre Juan Carlos Rodríguez Ibarra...

V. GRUPO Z

El Periódico, Interviú, Tiempo…



Rafael del Barco Carreras



¿Quién decidirá el desnudo y escándalo en portada de INTERVIÚ?, ¿o la magnitud de las letras en los titulares de EL PERIÓDICO?, ¿Juan Carlos Rodríguez Ibarra, el nuevo Presidente de la Junta de Extremadura, el de alguna caja de ahorros financiera, el metalúrgico supuesto comprador, o una mesa de sabios?. Quizá sea el último enredo de Antonio Asensio desde el más allá. Desaparecido él, su imperio se desmoronaba, pero lo salva su entrega al triunfante Socialismo, que a él le importaba un rábano. Su herencia no acabará igual que Cambio 16, Telexprés y tantos más… la quiebra y los juzgados.

La historia de Vueling, con otros colores, se repite. Aquí en lugar de Josep Piqué Camps y su contratante Manuel Lara, interviene Juan Carlos Rodríguez Ibarra, ex presidente de la Junta de Extremadura y un ex chatarrero convertido en gran empresario a la sombra del Poder en Extremadura, que primero comprará unos periódicos de Prisa, y después, por nada menos 500 o 600 millones de euros (según asciendan las deudas), 100.000 millones de las antiguas pesetas, el Grupo Z. Ampliaciones de capital, créditos con dudosas garantías, y titularidades pignoradas. Nadie invertirá un duro, ¡los locos con tanto dinero no existen! ¡En plena CRISIS!, y aplaude uno de la claca, “era hora que Extremadura se situara a la cabeza en España”. ¡Pobre Extremadura, que caro le saldrá que sus políticos manejen una fábrica de mentiras y autobombo con 3.300 empleados!. Tenía… porque la gran empresa que meses atrás los compradores pujaban por su compra, ahora abre expediente de crisis para quitarse de encima su gran activo, la mayoría de sus 300 directivos. Los reales “compradores”, que supuestamente unirán a las subvenciones y favores de la Generalitat los de la Junta de Extremadura, parece no tienen bastante y anuncian “regularizaciones de empleo”.

Me atrevería pedir desde aquí a algún viejo cabreado directivo de la casa (de los que este jueves, 5-06-08, se manifestaban temiendo por su empleo pero que no movieron un dedo y menos su bolígrafo por mis tres años de prisión preventiva) me contara los pactos y relaciones entre Javier de la Rosa y Asensio para cargar contra mí y soslayar su indiscutible relación (lo escribe el propio JUEZ ESPECIAL que también se olvidó del gran financiero) en el Caso Consorcio de la Zona Franca, ver www.lagrancorrupcion.com

A Asensio, que descabalgó a sus dos socios iniciales, no le hará feliz. Él, ambicioso sin freno, quería ser Murdoch, y un veinte por ciento, que dicen retendrá la familia de un negocio de fantasías en manos de políticos, no le agradaría. La vida y la muerte, y sus futilidades.